15 Agosto

¡Salgamos de paseo con nuestro gato!

gatos-paseo
Si te gustó ¡Compártelo en tus redes sociales!

Cuando se trata de entrenamiento de obediencia, a menudo asociamos esta actividad exclusivamente con perros.

Pero los gatos pueden ser entrenados con la misma facilidad que los perros si se les brindan los incentivos y las técnicas de entrenamiento adecuados para detener el comportamiento destructivo y para que hagan cosas como caminar con correa.

¡Salgamos de paseo con nuestro gato! 

 El adiestramiento con correa de un gato es diferente del adiestramiento con correa de un perro y, por lo tanto, requiere un equipo diferente. Asegúrate de utilizar equipo diseñado específicamente para gatos.

SI: un arnés para gatos bien ajustado.

NO: un arnés para perros pequeños.

SI: una correa liviana, de nailon o de tela.

NO: Correas de cadena, correas de tipo flexible.

Entrenamiento de correa  

 Paso 1: haz que tu gato se acostumbre a usar el arnés en interiores  

Colócale el arnés sin la correa.

Dale una golosina o dos con el arnés puesto y luego quítaselo  lentamente.

Solo debes darle golosinas cuando el arnés esté puesto, no  cuando no lo tenga.

Repite este proceso mientras aumentas gradualmente la cantidad de tiempo que tu minino use el arnés.

Paso 2: haz que tu gato se acostumbre a caminar con la correa (sin tensión) en interiores.

Una vez que se sienta cómodo con el arnés, colócale la correa.

Déjalo que camine con la correa suelta y síguelo a donde vaya.

Después de un rato, quítale  el arnés y la correa y repite este proceso durante unos días hasta que tu gato esté relajado y camine libremente.

Paso 3: haz que tu gato se acostumbre a controlar la tensión  

Mientras supervisas, permite que tu gato arrastre la correa detrás de él mientras se mueve libremente por la casa como en el paso 2. Después de que haya caminado un poco  trata de llevarlo suavemente en otra dirección.

Si lo está haciendo bien puedes recompensarlo con una golosina.

¡Nunca dejes una correa o arnés a un gato sin supervisión!

Paso 4: salir de paseo 

En un día seco y templado, comienza por llevar a tu gato a la puerta, ábrela y anímalo a salir.

Para ayudar con esto, arroja una golosina a un pie fuera de la puerta para atraer a tu gato. Si lo ves asustado o indeciso, no lo obligues a salir. En su lugar, detente e intentarlo más tarde.

¡Cuando se trata de entrenamiento, es mucho mejor terminar con una nota positiva que con una negativa!

Paso 5: Sé paciente 

Es posible que experimentes algunos contratiempos. Pero con amor y paciencia llegará el momento en que tú y tu minino podrán disfrutar de una excelente caminata al aire libre.

Como siempre, consulta con tu veterinario antes de presentarle a tu peludo cualquier tipo de actividad o régimen de ejercicio nuevo. Probablemente estará de acuerdo en que ésta es una excelente manera para que tú y tu gato salgan de paseo.

Recuerda que las mascotas son parte de nuestra familia y dependen de nosotros para su bienestar y felicidad.